¿Qué efectos tiene en el glaucoma el uso de la marihuana?
MARIHUANA Y GLAUCOMA… ¿es posible?
Cuando usamos nuestro idioma, el castellano, el vocablo “drogas” siempre tiene connotaciones negativas, ya que se refiere a sustancias que producen adicción y que son perjudiciales para el organismo. Sin embargo, el vocablo “drugs” en inglés tiene connotaciones más neutras, ya que a cualquier medicamento se le conoce como “drug” o droga.
Muchas de las “drogas” ilegales que se consumen tienen funciones terapéuticas: por ejemplo los opiáceos (morfina, heroína, etc…) se usan como potentes analgésicos. La cocaína es un excelente anestésico local. Las anfetaminas tienen varias indicaciones, entre otras los famosos trastornos de atención (TDAH).
Pues existe otra “droga” que puede tener también funciones terapéuticas para el tratamiento del glaucoma, y es la marihuana (cannabis). Ya en los 70 se realizaron estudios que mostraban que fumar marihuana bajaba la presión intraocular (PIO) al reducir la producción de humor acuoso en pacientes con glaucoma. A raíz de estos estudios se descubrió que un componente activo de la marihuana (el THC) podía bajar la PIO, y esto ocurría tanto si este ingrediente se tomaba vía oral o sublingual, en pastillas o bien inyectado o inhalado con el humo. El principal “inconveniente” de este tratamiento es que el efecto hipotensor tan solo se mantiene 3-4 horas, lo que es muy poco tiempo para evitar que la PIO dañe el nervio óptico, ya que necesitamos que la PIO se mantenga baja las 24 horas del día.
Razones por las que no es conveniente su uso:
1.- Para que la marihuana fuera realmente efectiva, necesitaríamos que el paciente la consumiera 6-8 veces al día, y como os podéis imaginar, con los efectos secundarios de ir “colocado” durante todo el día, impidiendo al paciente realizar una vida normal, conducir, trabajar o hacer deporte.
2.- Si además el paciente fuma la marihuana habría que añadir los efectos secundarios sobre los pulmones, ya que también puede dañarlos a medio-largo plazo.
3.- También habría que contar con la adicción que puede producir la marihuana (aunque esta no es muy intensa).
4.- Y los efectos neurológicos a largo plazo, que producen pérdida de concentración, de memoria y bajo rendimiento.
5.- Otro inconveniente de la marihuana es que no solo baja la PIO, sino que también puede bajar la presión arterial… y me diréis, ¿por qué esto es un inconveniente?. Pues lo es ya que este descenso de presión sanguínea puede bajar la presión de perfusión del nervio óptico, con lo que el efecto beneficioso sobre la PIO puede verse reducido.
Por lo tanto, y hasta que tengamos una nueva versión del componente activo del cannabis que baje la PIO de forma más duradera y con menos efectos secundarios, el tratamiento del glaucoma con marihuana NO ES ACONSEJABLE.
La Academia Americana de Oftalmologia se reafirma en su posición de que la marihuana no es un tratamiento probado del glaucoma… (Enlace: American Academy of Ophthalmology Reiterates Position that Marijuana is Not Proven Treatment for Glaucoma).
Existen en la actualidad fármacos mucho más efectivos, duraderos, con menos efectos secundarios y sin efectos adictivos.
Ante cualquier duda… consulta con tu oftalmólogo.
Hasta el próximo post…
@drbelda
Jaja, y sobre todo con menos efectos secundarios. 🙂
No tienen que mas inventarse ,tanto que en algunos paises ya es legal